“Estad siempre gozosos”.
1 Tesalonicenses 5:16
En una ocasión, después de celebrar con alegría el triunfo de uno de nuestros discípulos en un festival de canto, una persona se me acercó para exhortarme por ser tan efusiva, “Siga el ejemplo de Cristo” me dijo, “A Él se le vio llorar, pero nunca la Biblia dice que se le vio reír”. Este pastor tenía un concepto de Dios alejado de la verdad. El apóstol Pablo dijo a los Gálatas que el gozo es parte del fruto del Espíritu. La religión nos muestra a un Dios mal encarado y adusto, al que le cuesta mostrarse alegre, y a quien por lo general no se le concibe sonriendo. Pero aunque pocas veces se muestra esta faceta de nuestro Dios, Él es un Dios que se deleita y se goza1
El gozo, como parte del carácter de Dios en nosotros, brota desde nuestro interior. A diferencia de la felicidad, no depende de las circunstancias externas, sino que es capaz de manifestarse aun en medio de momentos de grandes dificultades y problemas. Nehemías dijo: “El gozo del Señor es nuestra fortaleza.”2 y Pablo recomendó a los filipenses, en momentos muy duros: “Regocíjense en el Señor siempre, otra vez digo: Regocíjense”3
Una vida llena de gozo habilita y fortalece para resistir las dificultades de la vida. No le permitas a las circunstancias de la vida, que te roben el gozo del Señor. A fin de cuentas, permanecer gozoso en todo momento, dependerá de tu decisión, más que de cualquier otra cosa.
Aplicación:
A pesar de las circunstancias que puedas estar viviendo hoy, puedes ser más fuerte si decides mantenerte siempre gozoso.
1Deuteronomio 30:9; Isaías 62:5; 65:19; Jeremías 32:41; Sofonías 3:17. 2 Nehemías 8:10 3 Filipenses 4:4
Pastora Libna Villegas de Parra.
Centro Cristiano “Estableciendo el Reino de Dios” (CeCERDi)
Ciudad Bolívar, Estado Bolívar.
Devocional: “Llenos del Espíritu Santo”.
Departamento de Redacción NotiCristo.